Discipulado en la Nueva Era I - Cartas a R. S. U.
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R. S. U. |
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Hermano mío: Tengo algo que decirle al entrar en este período de mayor utilidad y acrecentado servicio. Conoce muy bien su debilidad y su fuerza. Poco puedo decirle al respecto. Su fracaso se debe a que no aplica el conocimiento a las circunstancias. En lo que a los aspirantes respecta, con frecuencia la debilidad principal reside en determinado cuerpo, y la suya consiste en que no disciplina el cuerpo físico y en la incapacidad de aplicarle sus ideales cuando es necesario. A menudo lo trata demasiado bien, otras veces lo alterna con periodos donde el elemental físico es tratado con excesiva dureza. Si puede aplicar un tratamiento parejo y un método equilibrado para resolver el problema de su físico, mucha luz y conocimiento afluirán a su conciencia cerebral. Esto queda en sus manos y yo poco puedo hacer. Pertenece usted principalmente a la línea ocultista. Trabaja con la energía efectiva, y mentalmente está muy bien controlado y coordinado. Deberá trabajar con el cuerpo físico y emplearlo en la tarea que tiene que realizar, pues precisamente allí se introduce el obstáculo. Tiene ante sí una valiosa oportunidad [i356] y lo merece. No se deje desviar y cultive esa entereza que constituye uno de sus bienes más vitales. Quisiera señalar una cosa: al observarlo esta semana cuando practicaba sus ejercicios de respiración, noté que el aspecto dilatación del pulmón está indebidamente marcado, y que se esfuerza demasiado al hacerlo. La fuerza y la sutileza del proceso de pranayama reside en el poder del pensamiento detrás del acto de respirar, y de ninguna manera en la dilatación o depresión del torso. Todo ello lo resume el aforismo, "la energía sigue al pensamiento". El efecto principal debe producirse en los nadis etéricos que subyacen en los nervios y no en la actividad de inhalar y exhalar de los pulmones. No obtiene los resultados debidos... Debe trabajar mayormente con individuos y dedicarse a la tarea de solucionar los problemas de la vida; posee suficiente fuerza y ha obtenido experiencia en muchas vidas como para darla a los demás. Puede acrecentar este trabajo si encara con firmeza, seriedad y perseverancia, el cuerpo que lo obstaculiza.
Hermano mío: Últimamente ha hollado con mayor rapidez el Camino ascendente. Su horizonte es por lo tanto más amplio y su perspectiva [e333] más impersonal. Muévase constantemente y no se deje vencer por la inercia que lo obliga a arrastrar los pies. El trabajo que se debe realizar se acrecienta continuamente, hermano de antaño, para el cual lo necesitamos en forma más dinámica que hasta ahora. Capte la idea y permanezca firmemente conmigo en el trabajo que intento realizar. Esté dispuesto a aportar su sabiduría y poder a fin de instruir y enseñar cuando surja la necesidad... En los primeros trabajos de meditación se le dijo que pronunciara la Palabra Sagrada siete veces consecutivas. Quisiera que emprendiera ahora un séptuple trabajo sobre los centros, porque le será de ayuda para realizar alguna tarea sintética. No lo delinearé detalladamente porque está planeado para satisfacer la necesidad individual y como no es conveniente que lo lean todos, lo omitiré. Recibirá las instrucciones necesarias directamente. Sígalas con cuidado y vigile la vitalización del cuerpo físico como consecuencia, y prepárese para el servicio acrecentado a medida que pasa el tiempo. [i357] Usted aporta una sabia enseñanza al grupo, una sabiduría divorciada de toda crítica, acompañada también por la reticencia del oculista entrenado. Esa facultad la posee usted y F.C.D., en gran medida. Hermano de antaño, dé su sabiduría con inteligencia, sensatez y sin temor. A muchos de mis discípulos les hago ver el aporte específico que pueden hacer al grupo, al cual los afilié, para que con deliberación y conocimiento, puedan dar constantemente en las líneas indicadas y contribuir a la vida grupal. Poseemos el don de ser esas mismas cualidades personificadas y además el don de comprender que si personificamos en cierta medida algún atributo divino -grande o pequeño- podemos actuar como un canal para trasmitirlo desde un centro mayor. Ésta es la base de la doctrina de los Avatares o Divinos Mensajeros. Deben ser mejor comprendidos el don de Ser y el de transmitir deliberadamente calificados poderes. Le daré una breve frase mántrica que tiene el significado de una dedicación:
Durante los próximos meses, trate de comprender no sólo el camino que un discípulo debe seguir, sino también de conocer más profundamente la técnica para comprender el corazón del hermano, estudiando la dualidad de las energías de rayo (los rayos de la personalidad y del alma), que hacen de él lo que es en esta encarnación. Mi hermano de antaño: Durante los últimos seis meses hizo grandes esfuerzos, y el trabajo de refinar los vehículos va a la par. Tiene varios meses más de arduo trabajo, antes de que la personalidad esté a la altura de las exigencias futuras, pero su devoción y humildad, su clara visión y su sabiduría son de tal naturaleza, que se puede esperar que lo logrará. Hay dos aspectos de un espejismo incipiente -vestigios tenues y nebulosos- que deben ser vigilados cuidadosamente para que no se trasformen en una espesa nube entre usted y el sol. No los especifico, porque [i358] podría precipitar la nube. El espejismo no se disipa prestándole mucha atención. Desaparece por el poder de la meditación clara y firme, liberándose de la autoatención. ¿Puede captar el significado de esa frase paradójica? Me refiero a un confuso espejismo que quizás nunca le cause dificultades, siempre que no busque el auto reconocimiento y que ame con propósito puro a todos aquellos con quienes entra en contacto. Su trabajo de meditación y el foco de su atención, durante los próximos seis meses, consistirá en acrecentar su conocimiento del alma. Tiene un problema interesante y poco común; se basa en el hecho de que su conciencia se traslada todo el tiempo de la mente inferior a la superior, pero pocas veces hace contacto con el punto intermedio, el del alma en su propio particular nivel. El asunto es así hermano mío: Al construir el antakarana en esta etapa, se produce una brecha en el tramo donde se halla el alma y usted salta de la tríada inferior a la superior, lo cual significa que debe tender un puente desde el punto más elevado de la tríada inferior al punto más bajo de la superior, la Tríada espiritual. Por lo tanto, debe practicar con cuidado un ejercicio elemental -el alineamiento del alma y del cerebro, por conducto de la mente. Practíquelo durante un tiempo con comprensión antes de la meditación matutina. Haga su meditación breve y rápida. Tiene el hábito de cumplir con los tres "puntos sagrados", mañana, mediodía y atardecer. Le sugeriré que en esos intervalos, durante las actividades [e335] diarias, cambie considerablemente su método y trabaje con el color más que con las formas de las palabras, tales como pensamientos simientes o ideas. Usted es un ocultista nato y tiene la llave del reino de las ideas, pues posee en su mente las palabras contenidas en muchos libros. Por lo tanto, le sugiero el siguiente proceso:
"Que los Santos Seres, de Quienes soy discípulo, me muestren la luz que busco y me den la poderosa ayuda de Su compasión y Su sabiduría. Hay una paz que a toda comprensión trasciende, es la que mora en el corazón de quienes viven en el Eterno. Hay un poder que todas las cosas renueva, es el que vive y se mueve en quienes el yo es uno. Que esa paz sea con nosotros, que ese poder nos eleve, hasta llegar donde el único Iniciador es invocado, hasta ver el fulgor de Su estrella."
Le pido particularmente que haga de su diario espiritual un documento más vital, más organizado y fácilmente disponible para la enseñanza de otros. Tiene muchas cosas interesantes en él. Sin embargo es algo caótico y las ideas que contiene son difíciles de comprender. ¿Quisiera hacerlo en forma más correlativa, sintética y legible, para que las ideas así ordenadas y presentadas [e336] puedan servir a otros estudiantes? Usted posee mucho conocimiento ocultista que impartir, y cuando aprenda a expresar por escrito ese conocimiento, entonces surgirá el verdadero servicio que debe prestar... Dé lo que tiene que ofrecer, lo cual será mucho cuando aprenda a exteriorizar sabiamente su conocimiento. Hermano mío: El desaliento va cundiendo en su vida y siente desagrado interno por sí mismo y un sentimiento de fracaso que -si persisten- puede perjudicar lo que está construyendo tan bellamente. Los efectos de esos pensamientos no son constructivos. ¿De dónde viene este desaliento? Se debe a la comprensión de que su conocimiento interno sobrepasa su utilidad externa. Surge de la inteligente percepción de que los mundos internos contienen cosas de gran interés que usted nunca evoca ni aplica en el plano físico, y así es. Usted es un estudiante ocultista profundamente versado, y capta las realidades ocultas internas, excediendo la del estudiante común. Todo ello es introversión, porque no lo exterioriza a fin de ayudar al mundo; acumula y acopia, y si no lo emplea definidamente puede producir una condición difícil de cambiar más adelante. ¿Cuál es la causa de esta condición, hermano mío? Le diré con franqueza, son tres cosas, y sé que agradecerá cuanto le diga al respecto. La prueba que tiene ante sí es saber cómo empleará la información que le dé y los conocimientos que adquiera:
Me llamaron la atención sus informes de meditación. Hermano mío, hace constante contacto con la fuente de sabiduría y extrae de ella. Su intuición está despierta, su poder de interpretar los símbolos es poco común y su comprensión del plan sintético de la Gran Logia Blanca es real. ¿Y de qué utilidad es para los demás? Usted se parece a un depósito colmado hasta el tope, del cual no extrae lo necesario para satisfacer la necesidad de los resecos campos circundantes. Todo se desborda y se pierde. Esto debe corregirlo, hermano mío. Una de las primeras cosas que debe hacer es aplicar el conocimiento y la información ocultista, almacenados en su mente subconsciente, expresados únicamente en su diario espiritual y en sus informes de meditación. No me refiero aquí a la vida diaria, sino a que sepa apreciar inteligentemente la verdad que posee, la riqueza de información esotérica que se pierde, produciendo condiciones que lo conducirán a una eventual dificultad astral. Se esfuerza por vivir la vida y servir, y quisiera que ese servicio fuera nutrido por su conocimiento esotérico y por su cabeza y no simplemente por su corazón. Es esencial extraer de esa reserva para que su vida como esoterista sea fructífera... Por lo tanto, ¿qué haremos? Primero, en vez de meditar constantemente, emplee ese tiempo en ampliar y escribir las ideas que recibió, de modo que puedan utilizarlas los [i362] demás y llegar así hasta quienes necesitan ayuda... Dicho simbólicamente, lo que voy a decirle está contenido en un antiguo Libro de Reglas para discípulos, de la época del primer Patanjali: [e338] "La puerta se abre al mundo de lo que puede conocerse. Se abre desde el aspecto mental. Una vez abierta, cae sobre el pensamiento la llovizna de lo que puede conocerse. La otra puerta se abre por medio del profundo deseo. Se abre al mundo que todos los hombres conocen. Cuando ambas puertas se abren de par en par, el discípulo cumple el propósito del Señor de la Verdad. A través de la puerta más lejana caen las gotas de lluvia sobre su corazón. Él vierte la lluvia de lo que puede ser conocido sobre el mundo de aquello que los hombres conocen. Así pueden llegar nuevos pensamientos a los corazones de los hombres, así nuevas flores de ideas traen belleza a las polvorientas llanuras de la tierra". Siga su camino en paz y con comprensión hacia los pies de los Grandes Seres.
Mi hermano de antaño: ...la última vez que me comuniqué con usted le di mucha instrucción. Ahora le daré poca, porque tiene aún que aplicar la ya sugerida. Ante todo tienda a la sencillez. La fertilidad de su mente es un don grande y útil, adquirido durante muchas vidas de conocimiento práctico. Un jardín fecundo y una exuberante selva, son dos expresiones de la fertilidad, pero uno es bello y la otra necesita cuidado -que debe ser iniciado por un definido proceso de destrucción. En los últimos meses fue utilizado para iniciar un trabajo que puede ser de real servicio y lo hizo bien, posibilitando la futura revelación. Ha estado bien y se lo agradezco, hermano mío. Sé que no espera reconocimiento alguno, pero siempre los instructores del aspecto interno lo expresamos cuando es merecido. Por lo tanto, le diré que su trabajo fue reconocido. [i363] Internamente tiene mucho que hacer antes de que podamos valernos al máximo de usted. Procure por lo tanto hacer tres cosas:
Aténgase al simple delineamiento que le indiqué en mi comunicación anterior. No puedo cambiárselo todavía, porque no aprovechó la ayuda que traté de darle. No se desaliente y avance gozosamente en el Camino. En estos fatídicos días no se pueden perder esfuerzos en la autointrospección y el análisis demasiado íntimo, lo cual conduce a la desconfianza. Lo único que intento hacer en este momento, hermano mío, es darle una meditación, y le pido que la practique hasta nuevo aviso. Le daré también seis pensamientos simientes para la meditación. Por lo demás, mis anteriores recomendaciones quedan en pie, y su futura utilidad en la expansión espiritual venidera depende de que trate de olvidarse de sí mismo y que aplique correctamente el amor -permitiéndole amar con más facilidad. Estudie mi última comunicación sobre este tema y preste un servicio práctico, amoroso, eficiente y regular. El progreso realizado para expresar externamente su conocimiento interno ha sido indebidamente lento. Si le dedicara una [e340] actitud correcta y más enfocada, podría dar un salto hacia una luz más clara y una vida más eficaz. Frecuentemente le he dicho, su nota clave para el futuro es disciplina y más disciplina. El camino para la liberación consiste en subyugar el cuerpo físico a su voluntad, imponiéndole un destacado y ordenado ritmo. Por lo tanto, si tiene suficiente interés por los posibles resultados, podrá hacer los reajustes necesarios e imponer las medidas disciplinarias requeridas. También sabe cuáles son ¿y no es acaso simplemente la imposición de ciertas reglas en la vida diaria, tan sencillas que no evocan su voluntad? Anhelo evocar su voluntad dinámica por la práctica de la siguiente meditación.
Mi hermano y amigo: Mucho de lo que he escrito a S.C.P. es también de primordial importancia para usted. No haré referencia a ello aquí, porque tengo otras cosas que decirle. Lo insto de todo corazón (que lo envuelve en constante amor) a apartar su atención de usted mismo y a no preocuparse tanto de su fracaso por lograr la realización. Reconozca el fracaso, si lo hubo, y luego mirando la luz y con una sonrisa en los labios, dé la espalda a ese fracaso y siga adelante con firmeza. Le resulta difícil a D.A.O., un miembro de mi grupo de discípulos, aprender la lección de la autodisciplina, embargándola el espejismo del temor a la autoridad. Pidió permiso para abandonar el grupo y que alguien actuara en su lugar. Le sugerí que simplemente considerara su suspensión de todo esfuerzo grupal y del así denominado control que ejerzo, y que durante un año reflexione cuidadosamente antes de llegar a una decisión final. Para probarle a usted que su fracaso es básicamente superficial le pido que me preste un servicio definido. No se lo hubiera solicitado si hubiese fracasado. Le ruego que durante un año se haga cargo del trabajo de D.A.O., ocupe el lugar de ella en mi grupo y ayude a mantener la integridad de la relación grupal. No es la [e342] primera vez que lo hace, por eso pensé inmediatamente en usted. Aunque instintivamente mi mente decidió pedirle este servicio, tengo dos razones para ello. Usted posee seguridad de tacto y está libre de espejismos, algo que tanto necesitan en mi grupo los asociados inmediatos de D.A.O. En cierta medida usted sucumbe al espejismo del fracaso, pero muy pocas veces al espejismo que concierne a los principios del trabajo grupal. Confío que dará lo necesario. Además tiene una claridad de visión real y constructiva en esos casos en que no está involucrado el amor de su personalidad. Donde lo está, tiende a sobrestimar a los seres queridos y a preocuparse demasiado por ellos. ¿No es verdad, hermano mío? [i367] Sin embargo, en este caso su visión será clara y real. De modo que ocupe el lugar de D.A.O. y dé lo mejor de sí en esta situación, pero no abandone su propio lugar en mi grupo. El concepto que tiene D.A.O. de la libertad -como sucede con todos estos conceptos- puede actuar como una prisión. Su idea de la libertad puede ser una cadena que la aprisione, lección que debe aprender. El servicio que presta en mi grupo es secundario al amor que siente por su propio progreso, y tendré que indicárselo. Ningún discípulo que trabaja en un ashrama es totalmente libre. Cada uno está unido a sus condiscípulos por un vínculo egoico. La responsabilidad aceptada y las relaciones kármicas reconocidas, no pueden dejarse de lado con ligereza y finalmente deberán cumplirse. La disciplina de la vida grupal es para vivir en forma más elevada que cualquier ideal autoimpuesto respecto a la vida y a la verdad. Cuando un discípulo ve y relaciona su "dharma" individual y su responsabilidad grupal, entonces puede emprender la correcta acción. ¿Quisiera ayudarme en este problema? Sé que lo hará, hermano mío, y ¿quiere aceptar esto como evidencia de mi fe y confianza y también de la innecesaria ansiedad astral que constantemente sufre? Además le voy a pedir que haga una pequeña tarea personal. Sírvase releer todas las instrucciones que recibió y anote la información específica que le di sobre sus actividades en el plano físico. Luego observe lo que logró hacer y lo que aún le queda por hacer. Esto lo ayudará a renovar sus esfuerzos para dominar al cuerpo físico, vehículo que le trae más dificultades, y puede ser dominado mucho más fácilmente que los cuerpos astral o mental. Sin embargo, este cuerpo en esta encarnación le acarrea grandes problemas. Si lo dominara, su trabajo seguiría adelante. Hermano: Comenzaré con una palabra de aliento. Este año ha progresado y ha pasado de una condición relativamente estática a otra de creciente sensibilidad y desarrollo. En el pasado le indiqué sus fracasos y, con frecuencia, tuvo usted que analizarse a sí mismo y [i368] reprocharse, llenándome de gozo al observar su desarrollo y creciente capacidad para progresar. Le diré que tres años atrás consideré su situación con cierta duda respecto a si había alcanzado o no, su punto más elevado de realización para esta vida, y si (por el resto de sus años en la tierra) retendría, simplemente lo que había adquirido. No fue una realización fácil, hermano mío, dado el equipo con que emprendió el sendero hace tres vidas, pero no indica su mayor posibilidad, la cual deberá fundarse en el trabajo realizado en su última vida en la tierra. Avance ahora con amor, hacia mayores alturas de realización, olvidándose de sí mismo, y conviértase cada vez más en una torre de fortaleza y en una fuente de sabiduría iluminadora para sus condiscípulos. Tengo dos palabras para usted. Una basada sobre las instrucciones que le di en el pasado y que resumiré diciendo: Someta su vida en el plano físico, a la disciplina autoimpuesta; adhiérase a esa disciplina a toda costa. Usted mismo puede delinear esa disciplina adecuadamente. No es necesario que yo lo haga. El segundo mensaje concierne a su comentario respecto a que había permitido que su vida estuviera regida por la conveniencia y el hábito, pero no por la planificación. Le pediría que reflexione profundamente sobre esta frase y que aplique y eleve el concepto a la vida superior de servicio, no sólo a una vida disciplinada, ordenada y regida por su propia planificación impuesta, sino a ese servicio al cual está consagrado este grupo de discípulos. Esto saca el tema del nivel de la vida de la personalidad y hace que su vida mental abarque la vastedad de nuestro plan. Esto lo saben todos. Su teoría es buena y sana, pero su práctica debe ir a la par de la teoría si este grupo quiere emprender el verdadero trabajo mundial. Debe tener lugar un rápido ajuste y una nueva dedicación y alineamiento de manera que, mano con mano, hombro con hombro y los ojos fijos en la misma visión, enfrenten juntos la vida y sus vicisitudes, y allanen así recíprocamente el camino. Esto no siempre sucede. Por lo tanto, hermano mío, deje que el plan moldee su vida y sus actividades y que la disciplina produzca el instrumento [i369] necesario para el trabajo que debe realizarse. Actualmente, grupos de [e344] discípulos están siendo entrenados en el trabajo telepático, prestando tal servicio al mundo -una pequeña réplica del trabajo que la Jerarquía lleva continuamente a cabo en las mentes de los hombres. Cuando comience a hacerlo podrá trabajar para cambiar las condiciones y afectar a ciertas vidas. Este trabajo no será verdaderamente posible donde existen la crítica, la autoconmiseración y la palabra errónea, pues una persona basta para impedir que afluya el pensamiento grupal. Por lo tanto le pido a mi grupo de discípulos, que este año se prepare para ampliar el servicio que debe prestar y que cavile profundamente sobre el trabajo de trasmitir el pensamiento como servicio mundial. Las frases esotéricas que usted debe considerar son:
Hermano mío: Usted tiene, como a menudo le dije, sólo un grave problema en relación con su cuerpo físico. Permítame indicarle las fuerzas de los rayos que lo rigen y creo que ello iluminará su problema. Su cuerpo mental es de primer rayo y esto le permite [i370] ser un verdadero estudiante de ocultismo. Su contacto con el alma es tan definido y real que su cuerpo mental no erige barrera alguna entre el alma y su personalidad o entre usted y sus condiscípulos. Siempre comprende mentalmente y es incluyente. No digo en teoría, sino de hecho. Pero su cuerpo astral, pertenece también al primer rayo, acontecimiento excepcional que raras veces se [e345] produce. Aquí es donde se introduce el sentido de separatividad, porque esa tendencia de primer rayo le produce dos cosas: a. Nutre su sentido
de separatividad y tiende a aislarlo. De este modo está a menudo emocional y astralmente desapegado y aislado de quienes lo aman y también de sus semejantes. De allí que haya un continuo conflicto entre su alma amorosa y su vehículo astral aislado y solitario. La solución aparecerá inmediatamente con toda claridad. Su cuerpo físico pertenece al séptimo rayo. Reflexione, por lo tanto, sobre las relaciones internas y el efecto externo de sus fuerzas de rayo, tales como se indican a continuación:
Como observará, su alma tiene mucho que ver con las líneas de energía definidamente relacionadas con el primer rayo: 1-3-7. En consecuencia, se sentirá alentado al ver también que la vida amorosa controla su trabajo y servicio. Me di cuenta de ello y ¿le parece que lo halago o estimulo, hermano mío? Quizás hago ambas cosas. Reflexione sobre estos hechos en los meses venideros.
Mi hermano de antaño: ¿Qué podría decirle? Usted no sentiría ningún respeto por mí si no le recordara la necesidad de someter su naturaleza inferior a la disciplina, pues no sería [i371] un verdadero amigo e instructor. Si se lo recuerdo, acreciento su responsabilidad, y esta acción no es la de un verdadero amigo e instructor. Los discípulos entran en el aura de la Jerarquía en forma definitiva. Usted es un discípulo. Los discípulos evocan en nosotros, los instructores en el aspecto interno de la vida, muchas y variadas reacciones. A veces, cuando observamos a algunos de ustedes, nos damos cuenta que antes de otorgarles nuestra plena confianza, debe transcurrir mucho tiempo; primero, todos deben alcanzar la sabiduría, la integración y el contacto con el alma. Cuando [e346] algunos penetran en la luz jerárquica, sabemos, al estudiarlos, que aunque haya contacto y conocimiento hay también ambición, violencia y egoísmo, y que estos defectos deben ser neutralizados y subyugados antes de poder actuar con libertad, por parte nuestra y de ellos. Otros, siendo benevolentes y poseyendo una elevada y suave vibración, son débiles y están llenos de temor, apenados o abatidos por la preocupación, y debe enseñárseles el camino de la fortaleza y del desinterés divino, antes de que su servicio pueda estar a la altura de la demanda. Aun otros llegan a nuestra esfera de influencia ya integrados, sabios, dignos de confianza, pues poseen un porcentaje de capacidad mayor de lo común para servir y ser útiles. Su poder de vivir, influir y servir, es muy grande. Sin embargo, alguna parte de su naturaleza es débil y se expresa en forma limitada. Esa debilidad podría ser fácilmente contrarrestada si hay suficiente deseo y una voluntad espiritual iluminada -cualidades innatas, pero no aplicadas. Usted es uno de estos discípulos, hermano mío y camarada de larga data. Su mayor obstáculo reside en su cuerpo físico, que rechaza la disciplina y se resistió hasta ahora a todos sus esfuerzos. Esto lo sabe, y cuando se refiere a ello lo hace con un sentido de ciego fracaso. Por lo tanto, ¿en qué forma puedo ayudarlo, puesto que conoce las causas de las dificultades, los obstáculos que se interponen para una influencia mayor y la índole del problema que tiene que resolver? Lo único que puedo hacer es decirle que una vez que haya puesto su naturaleza física en línea con la exigencia de su alma, tendrá mucho más para dar que el discípulo común. Posee sabiduría y mucha experiencia, individual y racial. Posee un profundo amor y teme exteriorizarlo, en consecuencia no lo expresa como debería, obstaculizando y restringiendo su trabajo de ejecutivo. Posee [i372] una madura comprensión esotérica que le sería de gran ayuda a otros. Tiene radiación magnética, pero hay siempre otra etapa, más allá de la cual parece no poder ir -etapa donde interviene el cuerpo físico, que se niega a convertirse en un ininterrumpido canal para la expresión de la belleza y la radiación internas. Se le ha señalado esto y rogado llevar este aspecto de sí mismo en línea con la demanda espiritual y también se le indicó el campo más amplio de servicio que podría abrirse ante usted si decide cumplir la tarea; o negarse a emprenderla, haga como mejor le parezca. Quizá, más adelante, veré un pronunciado cambio -pleno alineamiento e intensificada radiación. [e347] Le pediría que dedique mucho tiempo (por lo menos una hora) cada domingo, a hacer contacto con mi aura y, por intermedio de ella, con el aura de la Jerarquía. Los resultados de este esfuerzo deberían ser vitales y de importancia a fin de resolver su problema. Lo dejo con las últimas palabras de las frases ocultas que le di hace un año: "Luego recordó y se inició el trabajo activo." Espero que pronto pueda pronunciar estas palabras en lo que a usted respecta y no las anteriores, "y el Maestro artesano esperaba".
Mi hermano y amigo: ¿Qué puedo decir que ya no le haya dicho? Sólo recordarle el hecho interesante de que todas las fuerzas de su personalidad pertenecen a la primera gran línea de poder, de aislamiento y de separatividad. La única influencia de segundo rayo por cuyo intermedio llegará el amor, es su alma, y quizás interprete erróneamente las implicaciones concernientes. Por eso, su vida de amor depende de la amplitud del contacto con su alma, que debe mantenerse vivo y vital, de lo contrario predominará la idea de la personalidad, el deseo de alejar a las personas, el sentido de aislamiento y el orgullo predominante. La dificultad se agrava debido a que el rayo que rige a su raza y también a su personalidad, más [i373] fuertemente de lo que cree, es el tercero. Por lo tanto, la milenaria separatividad de su trasfondo racial acrecentará su idea de apartarse de todo contacto de la personalidad. Únicamente le hará ver el espejismo de que los únicos contactos posibles para usted son los alcanzados por intermedio del alma. Si fuera así hermano mío, ¿para qué permanecer en un cuerpo físico, pertenecer a un grupo de discípulos y ser tan querido por quienes lo circundan? Sus condiscípulos lo aman y le dan todo lo que pueden del amor de sus almas. Quienes están cerca suyo en el plano físico le dan amor y devoción de la personalidad. Lo primero lo acepta con orgullo y comprensión; lo segundo lo rechaza con orgullo y sin comprensión. Antes de que pueda reclamar las plenas prerrogativas de un discípulo aceptado (y usted lo es), debe penetrar detrás de la pantalla o cortina de su personalidad, y ser consciente de cuán violentos son sus sentimientos respecto a las diferencias raciales, posición social, diferencias de clase y afectos de la personalidad. Existe en usted algo que casi llega a ser un odio inhibido. Eso es parcialmente racial, europeo y en parte un sentido totalmente [e348] innecesario de inferioridad social y personal. Usted mismo trata de asegurarse de que todo esto no existe. Se niega a reconocerlo premeditadamente. Se dice: yo soy todo amor y comprensión porque soy un alma. Muy frecuentemente es un alma y la influencia que ejerce es la del alma. Pero detrás de todo hay un punto ciego. Éste es análogo al espejismo de "enterrar la cabeza en la arena" y negarse a aceptar las limitaciones de su personalidad en estas líneas. Con su sabiduría y su contacto con el alma, podría, si quisiera, fácilmente resolverlo. Le hablo con toda franqueza hermano mío, porque confío en usted y sé que confía en mí. También confía en el amor que sus hermanos de grupo le profesan. Su problema debe ser encarado en forma distinta de como lo encaran sus condiscípulos. Es mucho más difícil por el hecho poco común de que su cuerpo astral es de primer rayo. El rayo de su personalidad, el tercero, está centrado en su cuerpo astral, aumentando sus poderes y espejismo y el aferramiento que tiene sobre usted. Su problema es atraer la energía del alma con tal poder que [i374] expulse la fuerza de primer rayo, lo cual le proporcionará un cuerpo astral de segundo rayo al terminar esta encarnación. La meditación que le daré está basada en las palabras "como un hombre piensa en su corazón, así es él". Por lo tanto, quisiera que reflexionara detenidamente sobre las diferencias que aparecerán en la expresión de su personalidad si poseyera un cuerpo, astral de segundo rayo. También deberá escribir un artículo para mí, donde haga resaltar las características de un cuerpo astral de segundo rayo. Luego se esforzará cada día por desarrollar estas cualidades de segundo rayo, aplicando los métodos de amor, contacto, atracción, comprensión, simpatía y compasión, de segundo rayo. Su equipo carece totalmente de las dos últimas cualidades, y su carrera como ejecutivo intensificaron necesariamente este defecto. Recuerde que no dije que carecía de amor. En el pasado, acostumbraba a complementar este defecto mediante la apreciación intuitiva de la gente, pero últimamente se ha endurecido en cierto aspecto -la simpatía- y se cristalizó en un molde racial que no le pertenece, basado en el desarrollo del centro cardíaco que, hasta ahora, sólo se ha abierto en dirección a su propio pueblo y hacia la Masonería. Haría bien en dedicar diez minutos cada mañana al ejercicio que aquí le delineo... Luego busque el alineamiento cerebro-mente con el alma, y vea afluir el amor del alma a su personalidad, trasmutando sus fuerzas y actuando en el plano físico, lo cual se expresará como amor de la personalidad, animado y [e349] dirigido por el amor del alma. ¿Visualiza esto, hermano mío, como lo veo yo? El perfecto amor rechaza el temor. Su personalidad no está en la línea del amor sino del poder. Teme al amor y a su expresión. En este enunciado le he dado un indicio sobre el problema de su alma. Sus condiscípulos lo aman y lo amarán cada vez más. En la actualidad usted no permite que lo amen, tampoco los comprende, y los interpreta mal. Cuando hay poco amor verdadero, hay poca real comprensión. Cuando usted actúa como alma ama mucho y en forma muy impersonal. Sin embargo, no es todavía un Maestro, por eso es incapaz de amar impersonalmente sin herir. Por lo tanto, también tiene necesidad de amar personalmente. [i375] Lo ayudaré donde pueda y le daré mi amor personal -mi amor impersonal siempre lo tuvo. NOTA: Nada ha impedido que este discípulo colabore activamente con El Tibetano y con el grupo de Sus discípulos |
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