Discipulado en la Nueva Era II - Cartas a E. E. S.

      


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E. E. S.

 

[e548] Agosto de 1940

Hermano y colaborador de antaño:

     Este año, o más bien los últimos tres, muchos problemas surgieron en su vida, complicados por el hecho de que el vehículo físico no actúa como debería hacerlo. El vehículo físico debe aprender a soportarlo, a cuidarlo con verdadera sabiduría y, al mismo tiempo, a olvidarse de él, al servir a la humanidad y a nosotros. La primera actitud se infiere del correcto cuidado físico; la otra, establece la nota para la reacción mental. Creo que lo sabe y está trabajando exitosamente para vivir de ese modo. Lo menciono porque una de las cosas que todos los discípulos deben hacer (antes de la iniciación) es adoptar una correcta actitud mental hacia ese aspecto del cuerpo físico que no es un principio, sino el autómata de las fuerzas que afluyen del hombre interno. La energía que rige al cuerpo físico emana de ese aspecto, o aspectos integrados donde reside el foco de la conciencia. Por lo tanto, tendrá perfecta salud cuando la conciencia se enfoque permanentemente en el alma. En la actualidad ninguno de ustedes puede hacerlo debido a la etapa de evolución alcanzada y a la relación y el karma masivos, superpuestos al karma individual

     Está solucionando adecuadamente la situación, hermano mío, y no es necesario decirle dónde podría haber una expresión impuesta en la vida del alma, porque es consciente de sus propias limitaciones y debilidades. Su cuerpo físico de primer rayo le resulta útil de muchas maneras. Procure que la tendencia de primer rayo a apartarse de todo contacto y penetrar en la altivez aislada de primer rayo, no lo condicione indebidamente en el plano físico. Sabrá a qué tendencia [i641] me refiero. La meta de su vida en este momento es proporcionar fortaleza amorosa a los demás, extrayéndola usted mismo de la fuente de total amor. Usted puede ayudar mucho y lo hará ahora con acrecentada comprensión amorosa.

     En lo que concierne a ciertos problemas de actividad, ya conocidos, le recomiendo que persevere con mucha precaución y prudencia. Las primeras etapas del trabajo que lleva a cabo están preñadas de peligro, y también lo sabe. Si se superan exitosamente dichas dificultades, aminorarán grandemente los riesgos posteriores de su planeado trabajo. A.A.B. hablará con usted sobre esto si lo desea, y le hará conocer mis sugerencias, cuando las pida. Hablé con ella y se lo hice saber, de allí la brevedad de esta comunicación. Usted comprenderá.

     [e549] Sin embargo, le daré una meditación y le pido que la practique dinámicamente. Quiero decir que se convierta simplemente en un punto de concentración cuando la lleve a cabo, excluyendo de su conciencia, temporariamente, todos los problemas y condiciones personales. Para lograr esta concentración, le daré un ejercicio de respiración junto con la meditación.

1. Relájese y dirija las pupilas de los ojos hacia arriba. El sistema indú de elevar las pupilas le ayudará en este asunto, y cuando cesa u olvida el temblor de los párpados, indica que se alcanza el relativo equilibrio físico.

2. Haga siete largas respiraciones lentas y sin esfuerzo, visualizándose como que usted asciende cada vez más con cada respiración. Para hacerlo con mayor facilidad imagínese ascendiendo siete empinados escalones.

3. En el punto más elevado alcanzado entone el OM, reteniendo por un acto de la voluntad su fuerza en la cabeza, pero sin ninguna tensión ni presión. La retención de la energía no es un asunto físico, sino un proceso mental. Este tema es importante.

4. Mantenga la conciencia lo más elevada posible en la cabeza, vea por cuanto tiempo puede mantener la actitud de escuchar sin llegar a ser negativo u olvidar [i642] quién es usted o qué está haciendo. En este trabajo nunca pierda el sentido de la identidad personal. No mantenga, sin mi permiso, más de tres minutos la actitud de escuchar.

5. Exhale el OM a través del centro ajna, el centro entre las cejas, y diga:

Elijo el camino del intérprete, por lo tanto pido luz.

Elijo el camino de la guía amorosa, por lo tanto pido que se me otorgue poder para elevar.

Elijo el camino de la inspiración, por lo tanto pido que afluya la vida.

Elijo el camino de la integración, por lo tanto pido el sello del silencio.

6. Entone el OM siete veces y prosiga con su meditación grupal.

     Cada una de estas frases tiene tres significados esotéricos. Tome una de ellas cada mes, y luego repita dos veces el proceso de reflexión, abarcando todo un año. Procure llegar a significaciones más profundas que las que aparecen en la superficie.

NOTA: La última instrucción a este discípulo le llegó inmediatamente después de recibir la última del tomo primero, pagina 594; la nota al pie aún es aplicable.


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